Nuestra Señora de Medjugorje: la Oftalmóloga del Corazón.

Quiero compartir contigo unas vivencias que he tenido en nuestro último viaje al Santuario de Medjugorje (Bosnia). La experiencia ha sido tan profunda para mi, tan reveladora que quizás te sirva a ti también en tu despertar de consciencia. Por supuesto es algo personal y quizás no sintonice contigo.

Uno de los primeros mensajes que recibimos al llegar al santuario fue:

«Si supieras cuanto te amo, llorarías de alegría»

Nos dejó claro que pronunciáramos internamente esta frase, como si tu voz interior, tu Esencia Origen, te la dijera al oído para escucharla con todas tus células. Y que si de verdad la escuchamos asi, recordar que SOMOS AMOR, libera los velos del corazón, la tristeza y esa profunda añoranza del alma al olvidar quienes somos. Esta reconexión produce infinita alegría.

Si de algo me ha servido este viaje a Bosnia, es para darme cuenta que llegué ciego y que tras conectar con esta Presencia, empecé a ver…desde el corazón.

Esta Presencia es un Portal en si mismo. Te fundes con ella, te abraza y te pide que tengas el valor de compartir con ella tus miedos, tu dolor, lo que te impide ver, avanzar….al hacerlo, al desnudarte, su infinito Amor te envuelve y expande el corazón de tal forma que VES a través suyo…más allá de lo habitual, otras opciones, tus propias debilidades transformándose en fortaleza. Un viaje inolvidable, conmovedor, único.

El problema en la visión no radica en los ojos, sino en todas las capas que bloquean la visión interna procedente de nuestro corazón, al mantenernos centrados en la mente, el ego. Y allí en aquel templo de sanación, si te mantienes en la escucha interna, te llevas unas potentes gafas para VER.

Creemos ver, pero en realidad hasta que esas capas no caen, no vemos nada. Me di cuenta de todas las dioptrías a subsanar, dioptrías de inconsciencia, de rabia, miedo, intolerancia, crítica.

Creemos ver, sin embargo nuestros programas y creencias, dar por hecho cualquier cosa, potencian los velos.

En mi afán por vivir la magia y la belleza, me di cuenta que solo iba en una dirección: un atardecer, un bosque, una playa cristalina, un pájaro, una roca…¿qué hay de todas las situaciones y relaciones que nos incomodan, es decir la vida cotidiana con la que tenemos que lidiar? De las personas que sacan lo peor de uno mismo? De nuestro jefe autoritario? Del vecino maleducado? De los que no escuchan, de los que creen que saben, de los que están dormidos y les resbala todo? De una espera interminable que nos hace creer que estamos perdiendo el tiempo? Esto también es magia.

Si sabemos extraer y VER con el corazón la enseñanza, estas situaciones asi entendidas, son atajos…nos permiten sanar de forma muy rápida, avanzar años y años si dejamos de caer en la crítica y comentarios absurdos…y es que caemos fácilmente en la tontería…¿porqué antes de enjuiciar o emitir nuestro veredicto, no respiramos, nos ponemos en modo observador y miramos más allá para comprender la enseñanza escondida para ponerle fin?

¿Cómo ver magia en lo que nos incomoda? Pues ahí también está, aguardando que saques tus Poderes para liberarte y hacerte más fuerte, mas consciente. Nuestro principal poder radica en que somos YIN-YANG (UN@): AMOR+ACCIÓN.

El juicio y quejas rápidas son fugas por donde malgastamos nuestro Poder Interior, ausencia de amor y respeto hacia nuestra divinidad…para Ser Un@ nos toca integrar que TODAS las situaciones son una bendición.

ACEPTAR TODAS las situaciones nos gusten o no, tal y como son en lugar de quejarnos por todo…LA MAGIA ESTÁ POR TODAS PARTES…todo encierra un mensaje para ayudarnos a conectar con nuestro corazón y para despertar. ¿Cuándo me haré el favor de ser realmente amable, generoso, amoroso y respetuoso conmigo mismo? ¿Cuándo me atreveré a mirar fijamente a los ojos de mi saboteador interno, para plantarme y bajarle los humos?

Visitar a la Virgen de Medjugorje abrió mi corazón…me di cuenta que nos hemos creado una vida, una casa, familia, pareja, trabajo a nuestra medida…cuando salimos de allí (nuestra zona de confort) y nos ponen a prueba, salen nuestras sombras, personajillos acostumbrados a campar a sus anchas y controlar mi vida…el crítico, el iracundo, el exigente, el controlador, etc…nos enfadamos porque «el ahí fuera» no es tal cual lo hemos creado en nuestro mini mundo…tiene que cumplir exactamente nuestros criterios y expectativas… Y esta actitud causa estragos: dolor, sufrimiento y desconexión.

Tenemos egos obesos. Demasiada comida basura y poco ejercicio. La Consciencia, la auto-observación, el respeto hacia uno mismo son el mejor régimen posible para quitar el exceso de peso…constancia, consciencia, compromiso.

Adaptarse a cada situación (en contraposición a la rebeldía e ira), facilita la apertura del corazón, libera dioptrías…la vida es así, cambios e imprevistos constantes…más nos vale desarrollar el poder de adaptación!!!si solo somos muy espirituales en las situaciones placenteras, gozosas, seguimos negando el UN@…seguimos rechazando las pruebas, ¡¡¡la salsa de la vida!!! Y esta salsa no engorda, modela la silueta del ego.

Es fácil estar en paz cuando todo es favorable, el auténtico reto no es ese, sino ¿cómo nos desenvolvemos cuando la vida presenta desafíos, situaciones imprevisibles?… Tras una meditación, un viaje iniciático, la vida pondrá el examen pertinente para ver si lo que hemos sentido se queda en un momento guay que duró media hora o si somos capaces de llevarlo a la práctica para que no se quede en una hermosa teoría e impregne cada célula, para que por fin se mantenga presente cada instante.

Al ego no le mola nada perder peso. Por ello hay que ir reduciendo el alimento con moderación, el ejercicio es muy recomendable y saludable: técnicas, herramientas con las que sintonices para calmar la mente, armonizar las emociones, elevar tu vibración…todo ello sin pasarse para evitar las agujetas, los excesos.

Una visita periódica a la Oftalmóloga del Corazón facilitará la sanación de nuestra ceguera…y potenciará el músculo del Amor, por esta razón, volveré.

¿Entonces qué, tonteamos o despertamos?