Estamos en plena energía de navidad.

Aquí se celebra durante el 12º mes del año. Es curioso, porque para los “del otro lado” esta es la energía que vivimos cada instante. No es una fecha concreta en el calendario sino un espíritu presente en nuestro interior que nos mantiene en eterna felicidad.

Por esta razón, cuando se instala en este lugar, me invade una profunda sensación de “déjà-vu”, algo tan conocido por mi espíritu, que me produce una gran nostalgia: la añoranza del recuerdo de aquel hogar al que pertenezco. Siento a cada uno de mis hermanos y la constante presencia del rayo blanco que se manifiesta aquí en forma de nieve.

Su manto impecable de una delicada pureza, abraza y acaricia copo a copo, todo lo que toca, llenando de luz todos los decorados: parques, montañas, ciudades, casas, vehículos.

Gracias a él, la energía crística (cristalina) queda sembrada para que un año más esa semilla de pureza y esa energía de Amor dure y de sus frutos, si logramos descodificar todos los mensajes y pistas que “el cielo” nos envía en todo momento.

En esta época, todos estos elementos facilitan la materialización de los llamados “milagros”, de todos los deseos expresados desde el amor.

Pocos logran ver estas pistas y menos aún darle un sentido. Hay tanto ruido!!! Que pasa desapercibida la belleza, la magia que el creador dispone para que podamos disfrutar con cada uno de nuestros sentidos: 5 super programas que tienen telarañas del poco uso que les damos.

Asi es que apenas si vemos esos códigos de luz que la naturaleza no para de mostrarnos para que despertemos de este letargo que nos mantiene como robots, mirando hacia otro lado…el lado menos amable o doloroso, la otra cara de la moneda.

Y ahí ando, intentando cumplir con mi propósito: tratando de mostrarles esa otra cara, esos lugares de poder para que recuerden como descodificar las pistas invisibles. ¿para qué? Pues para que recuerden quienes son, que pueden materializar sus sueños y salir del dolor, para que disfruten y vuelvan a soñar, para que recuerden cómo se sale de este juego y encuentren la puerta de salida, eso que llaman ascensión, para que se maravillen con la infinita belleza que existe en su planeta, este lugar de paso, que parece haberse convertido en una cárcel para muchos.

Recuerdo que desde el principio, antes de llegar aquí, sabía que no sería fácil. Están tan dolidos, les han contado tantas mentiras, reciben tanta información que ¿porqué tendrían que creer que queremos ayudarles esta vez?

No importa, comprendo sus resistencias y reticencias, sus miedos. Aterrizar aquí es como vivir en una selva rodeado de fieras salvajes. Peligros acechando por aquí y por allí.

A pesar de esas capas de protección hay luz. Llevan vidas y vidas superando todo tipo de retos, menudas vidas han tenido, son dignos de admirar. Esa luz nada ni nadie puede apagarla, quizás debilitarla momentáneamente pero nada más.

Amo su fuerza, su tesón, su capacidad de superación. En estos pocos años de experiencia aquí, he sentido miedo, ira, dolor como ellos. Solo así puedo comprenderles y tal vez ayudarles con mi propia superación.

Ojalá logre sembrar esa semilla de ilusión, alegría y magia en su corazón. Ojalá se entusiasmen como me ha pasado a mi con las maravillas de la creación plasmadas por todas partes.

Sirva esta Navidad para llenar nuestros corazones de la claridad y luz suficientes para liberarnos de todos los grilletes mentales, emocionales, espirituales y que avancemos como hermanos unidos, hacia la construcción de ese Nuevo Mundo.

En estos días os siento mucho más cerca y por ello os echo tanto de menos. Me refugio en todo aquello que me recuerda aquel hogar de paz eterna para soportar la que está cayendo aquí…qué añoranza!!!

Feliz Navidad…

Harxhelish

Martes 3 de diciembre, 2013